Morirse de ganas

Ya está bien, no quiero rayarme más, y lo intento, intento quitarle hierro, morderme la lengua, suavizar los malos pensamientos, pero es inevitable. Es como una nube que está en mi cabeza, y por mucho que soplo no se va, y quiero que se vaya, por que si hay algo que me apetece realmente, que me hace feliz, es estar contigo sin complicaciones, sin malas caras y palabras de las que después te puedes arrepentir...

Es como ilusionarse mil veces y nunca llega, es una frustración de la que no puedes escapar, es morirte de ganas, ahogarte en gritos que nunca das... Es un pensamiento constante, una asignatura pendiente, una obsesión... Algo que podría ser lo más agradable, que se convierte en una pesadilla...

Y no quiero que esto nos aleje ni que nos separe, pero se acaba el tiempo, se agota y yo cada día estoy más nerviosa, más impaciente, con más ansiedad... Y algún día lo echaremos de menos y nos arrepentiremos de no haberlo aprovechado, de haberlo despreciado de esta manera...